Autoestima

Durante la adolescencia, el adolescente cambia la forma de socializarse de la niñez, donde buscaba la aprobación de sus padres y acataba normas de forma más pasiva, por otra en la que se muestra más crítico y desafiante y en la que busca la aceptación de sus iguales. Además, recibe una mayor presión por parte de padres y profesores, que esperan de ellos un comportamiento más adulto y responsable.

En esta etapa, por tanto, son muy importantes las habilidades personales de las que puedan disponer, destacando, entre ellas:

La autoestima:

es la valoración que hacemos de nosotros mismos. Un sentimiento, una percepción subjetiva, de lo competentes que nos consideramos. Un buen auto-concepto es un factor protector, especialmente en la adolescencia, ya que nos ayuda en la consecución de nuestros proyectos y metas. La autoestima y el éxito o fracaso se relacionan de manera bidireccional. Si tienes una mala imagen de ti mismo, no confías en tus capacidades, te centras en lo que no puedes lograr olvidando lo que sí, anticipas fracaso en tus conductas y, normalmente, fracasas en tus intentos. Y, en el otro sentido, cuando intentas lograr objetivos no alcanzables, cuando no re-defines los objetivos y fracasas de manera repetida en su consecución por no estar adaptados a ti, tu autoestima baja ante la frecuente exposición al fracaso.

valía personal

La tolerancia a la frustración:

es la capacidad que tenemos de adaptarnos a situaciones que no nos son favorables, aceptando no lograr aquello que esperábamos o deseábamos. Puede tratarse de una simple demora en conseguir la meta u objetivo o, por el contrario, de una situación de imposibilidad total de lograrlo, generándose en ambos casos un sentimiento de frustración y otras emociones negativas que debemos gestionar. Una baja tolerancia a la frustración puede generar conductas agresivas y comportamientos inadecuados.

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La asertividad:

es un estilo de interacción social (conjunto de pensamientos, emociones y comportamientos) consistente en ser capaz de expresar y defender nuestra opinión o pensamiento de forma libre, respetando al otro. (Consultar «Derechos Asertivos») La falta de asertividad en los adolescentes les puede llevar a un estilo de interacción social pasivo, o de sumisión, o agresivo, o de subversión.

«Derechos Asertivos»

Todos los seres humanos, por su naturaleza, pueden…

* Actuar de modo diferente a como los demás desearían que actuasen.

* Hacer las cosas de manera imperfecta.

* Equivocarse alguna vez.

*Olvidarse de algo.

* Pensar de manera propia y diferente.

* Cambiar de opinión.

* Aceptar críticas o quejas que consideren justificadas y rechazar las que consideren injustas.

* Decidir la importancia que tienen las cosas.

* Ignorar o no entender algo.

* Formular y Rechazar peticiones.

* Expresar sus sentimientos (alegría, tristeza, ira, miedo, …)

* Elogiar y Recibir elogios.

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Más información en:

Manual ADCAs: Autoinformes de conducta asertiva.

Programa JOSEFINA

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